En un parque cualquiera
Un columpio se mece mientras roba risas a la pequeña que
lleva.
Le gustaría columpiarla lejos, muy lejos y alto, muy alto,
como ella siempre le pide.
Sueña con el día en el que pueda cumplir su deseo, y así
ver su carita de felicidad al rozar con la punta de sus dedos las nubes.
Intenta no perder la esperanza.
Mientras, el columpio se mece para seguir robando risas a
la pequeña que lleva.
Presentado al Concurso de Relato Hiperbreve El Sauzal 2018
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