Mi Alma De Letras

Como meta recorrerte trocito a trocito despacio sin prisas disfrutando poniendo una chincheta en cada parte de ti

Y buscando un cielo que se pareciera al mío me encontré con el tuyo

Ven, vayámonos a vivir a una estrella abramos y colémonos dentro eso sí, no pongamos cerradura ni candado entrada libre como el viento columpiémonos al salir la luna y juguemos en su reflejo ven, vayámonos a vivir a una estrella

Llama, llama calienta la noche aviva mi insomnio

Alma envuelta en letras letras que son alma las mías las que nacen de aquí de este hueco que tengo en el pecho de estos sentimientos que nacen de mi más profundo ser y que ahora comparto contigo para que seas cómplice de ellas para que en algún momento sean silencio que te grite lo que son mis letras mi alma

Y llamaron a mi puerta y era febrero y no quería dejar pasar más hojas del calendario y llamaron a mi puerta

No me hace falta ir al cine para ver a superhéroes, tengo mi propia lista de ellos. Paola, Cheli, Ana, Conchi, Toa, Lola, Antonio, Juan Luis … son algunos de los que ahora mismo se me vienen a la memoria y de los que tengo como ejemplo. Estos si que pertenecen a la liga de mujeres y hombres extraordinarios, de vengadores del destino, de luchadores que se han crecido ante una enfermedad a la que le han presentado batalla de forma valiente. Esta es mi lista, seguro que cada uno tiene la suya. 

Cantar para silenciar mis miedos para alzarme sobre mis propias inseguridades para sentir que soy capaz de superar adversidades

Y te lo cuentan y no te lo crees. Y te lo repiten y sigues sin creértelo. Y piensas que esto no te está pasando a ti. Que quizás… pero ese quizás es solo un intento desesperado de huir de la realidad. Una realidad que está frente a ti, en este preciso momento, y que mueve los labios y al que no escuchas. Que se arma de paciencia porque está acostumbrado a soltar esta triste retahíla y que quiere terminar contigo para poder pasar al siguiente paciente, que lo mismo hasta corre con tu misma suerte. Le entiendo, no debe ser agradable tener que dar estas noticias. No está en la lista de deseos de nadie al levantarte por las mañanas. No sé… en realidad no me estoy enterando de lo que tengo, aunque no debe ser nada bueno. No me quiero enterar. Quizás… si cierro los ojos y no le veo, ¿desaparecerá como el monstruo de debajo de mi cama? Voy a probar. Nada. Repito por si a la primera no lo he hecho bien. Mismo resultado, nada. Este es más fuerte. Venga, tendré que ser también más fuerte. M

Él siempre se había sentido diferente. Le gustaba soñar bonito, bailar, arreglarse, jugar con muñecas, ponerse los zapatos y la ropa de mamá frente al espejo, … Cuando hace unas semanas nos contó lo que le pasaba, por lo que sufría esos dolores y por lo que había tenido que ir al médico, nos quedamos en estado de shock . Él, como siempre, se había pintado su mejor sonrisa y, entre bromas, nos dijo que ya sabía que lo suyo había sido siempre ser mujer. Lo habían escogido de forma especial entre el 1% de los hombres a los que se le diagnostica cáncer de mama. Pero, como mujer valiente que se sentía, se enfrentaría a esto como una más de tantas adversidades a las que a lo largo de su vida se había enfrentado. Y que, como una más, superaría. Yo le dije que contara conmigo, como siempre. Que si algún color nos sentaba bien a las chicas de la familia ese era el rosa, añadí. Me abrazó como solo él me abraza y, en un susurro, me dijo que eso ya lo sabía, pero de quien debía de cui